2007/04/30

Catalanes por un Estado propio

Un grupo de blogeros de los Países Catalanes ha puesto en marcha una iniciativa que pretende hacer visible la fuerza del independentismo en ese territorio. Cansados de sondeos y encuestas sobre el apoyo que la idea de un Estado catalán tiene entre la población, ellos plantean que los ciudadanos lo hagan ver directamente a través de internet. La campaña, denominada "Sumémonos en el mapa por un Estado propio", viene a ser la continuación de otras realizadas con anterioridad, pero en esta ocasión con más ambición y apoyos, y contando con el soporte de la Xarxa de Blocaires Sobiranistes.

La iniciativa, que tiene una dimensión nacional, se reflejará gráficamente en un mapa de los Países Catalanes en el que se podrá ver el apoyo al independentismo en las diferentes localidades del país. Puede verse la marcha de la iniciativa en la página www.estatpropi.cat.

Paralelamente y sin que tenga conexión alguna con la anterior, estos días se ha presentado un documento cara al Primero de Mayo, en el que sindicalistas de distintas centrales (CCOO, UGT, Intersindical-CSC, CGT e Intersindical Alternativa Catalana-IAC) han realizado un llamamiento por la defensa de la soberanía en el ambito socioeconómico, en el que, entre otros puntos, defienden un marco catalán de relaciones laborales o la confección de un IPC catalán.

Se trata de una de las primeras iniciativas de este calado que se realiza en el mundo laboral, dominado históricamente por centrales de ámbito estatal como CNT, CCOO o UGT. La iniciativa es de base y no cuenta con el apoyo de los grandes sindicatos, pero puede servir para despertar la conciencia independentista en el mundo del trabajo catalán.

Para más información: Estatpropi.cat, Sindicalistesperlasobirania, Directe.cat

2007/04/29

Mirando a Escocia

¿Cabe alguna duda de que seguimos perdidos en nuestro propio laberinto? ¿Conoce alguien la forma de salir de él? Hoy tal vez no sea el día más adecuado para abordar cuestiones profundas, como la similitud entre las prácticas de la Inquisición católico-romana y la coalición de poder político-financiero que tiene su sede en Madrid. Son tantas las similitudes, que da vergüenza enumerarlas. En próximas entregas lo haremos.

Ahora bien, resulta enormemente frustante que dos procesos electorales paralelos, como los que se están dando en el Euskal Herria y en Escocia, resulten tan dispares. Mientras en el primero todo se basa en lanzar toda la maquinaria jurídico-policial contra los independentistas vascos, en el otro se atisba la posibilidad de que el Scottish National Party (SNP) de Alex Salmond, un partido que defiende sin máscaras la independencia de Escocia, pueda ganar los comicios, formar gobierno y convocar un referéndum por la autodeterminación nada menos que en el año 2010, como quien dice, pasado mañana.

Mientras en Euskal Herria los inpendendentistas nos consumimos en defender nuestro derecho a votar y ser votados, ellos, los escoceses, preparan el terreno para convertirse en el próximo estado europeo. Tal vez no lo consigan ahora pero con sondeos que hablan de un 80% de la población favorable al derecho a decidir, es cuestión de tiempo.

A veces da la sensación de que los vascos (independentistas) nos creemos más listos que nadie. Me temo que no podemos dar demasiadas lecciones, aparte de la lucha realizada y el sufrimiento que llevamos a la espalda. Quizá nuestra causa se ha encontrado con enemigos formidables, como el Reino de España y la República de Francia, pero tampoco es que el Reino Unido de Gran Bretaña y etcétera sea ninguna perita en dulce. Ha sido uno de los mayores imperios de la historia hace escasamente un siglo y mantiene aún una potendia económica y política digna de mejor causa.

Sospecho, no obstante, que en el caso de que la ciudadanía escocesa decida la separación, no se producirá ninguna tragedia. Los ingleses sabrán asimilarlo con fair-play y además siempre les quedara el consuelo de la corona común (tentación que tanto le gustaba en tiempos a cierta clase dirigente del PNV).

El próximo jueves podemos asistir a primer capítulo de un proceso que deberemos seguir con mucha atención. Hemos mirado demasiado a Irlanda y demasiado poco a Escocia, y me parece que es este último caso el que más parecido tiene con el nuestro, salvo las reservas petrolíferas aquí inexistentes. A partir de ahora convendrá observar al país de whisky, sabiendo que es mucho más que castillos, gaitas y faldas.

En cuanto a nuestro laberinto, en el que no nos ponemos de acuerdo en casi nada, seguiremos confiando en la sabiduría de ese parte del pueblo que, aún sin saber lo que hay que hacer, sabe muy bien lo que no hay que hacer. En esta ocasión, y aunque la campaña no ha dado comienzo, lo que no hay que hacer es dar el apoyo electoral a quienes se enquistan en el pasado, negando a este pueblo su derecho a ser libre, y en ese paquete incluyo, muy a mi pesar, al PNV de Imaz porque debo confesar que del PNV de Egibar sigo sin noticias.

Para más información: SNP web, The Herald (Glasgow), Alex Salmond-ekin elkarrizketa "Berrian"

2007/04/23

En Francia vuelve a ganar la derecha

Los resultados de la primera vuelta de las elecciones a la Presidencia de la República francesa estaban cantados. La dispersión suicida de la izquierda, el miedo a que el fascista Jean-Marie Le Pen pasase a la segunda vuelta como hace cinco años y la debilidad del mensaje del PS han sido factores esenciales para que el derechista Nicolas Sarkozy se haya hecho con un 31% de los sufragios, en una votación que ha registrado una altísima participación. Si sumamos a ese porcentaje el 18% del "centrista" François Bayrou, el 10% de Le Pen y el 2% de Philippe de Villiers, nos encontramos con un aplastante 61% de la derecha, y eso sin contar el voto marginal de los ruralistas cazadores.

Por el contrario, la izquierda amplia, incluyendo a Ségolène Royal (25%), se queda con un aproximado 35%, sumando a sus votos los de las candidaturas más a su izquierda: Olivier Besancenot (4%); Marie-George Buffet (1,9%); Dominique Voynet (1,5%), Arlette Laguiller (1,3%) y José Bové (1,3%). Por lo tanto, y a salvo de sorpresas, que podrían darse, lo más probable es que Sarkozy sea el próximo inquilino del Elíseo para los próximos cinco años.

Pero ocurra lo que ocurra en la segunda vuelta, ya hay varias lecturas que realizar sobre lo acontecido el domingo. En primer lugar que la incapacidad de la izquierda del PS de concurrir en una candidatura única ha sido calamitosa. No sé podía haber hecho peor, aunque el candidato de la LCR, Besancenot, se muestre orgulloso de ser la segunda fuerza de izquierda tras el PS y por encima del agónico PCF, un dinosaurio condenado a muerte. Semejante consuelo no hace sino distraer las conclusiones que se derivan del desastre. La izquierda, en su amplio sentido, ha reducido su voto en la primera vuelta con respecto a 2002 y tan sólo el propio Besancenot ha salvado los muebles con su pírrico 4%, ya que los resultados del resto de candidaturas han sido patéticos, en especial los de la candidatura de la comunista Buffet, que firmó el domingo su retirada de la política. La invisibilidad del PCF en la campaña ha sido ostentosa y aquel partido que rondaba el 20% del voto en las legislativas, y que estuvo por delante del PS en su momento de gloria, no es sino un esperpento abocado a la marginalización política.

Asímismo resulta estruendoso el fracaso de Los Verdes, que en este momento no son nada en la politica republicana, entre otras cosas gracias a la nefasta gestión de la Voynet cuando fue ministra en el gabinete de la "izquierda plural". Con vocación de partido-asistente del PS, Los Verdes no parecen aspirar a gran cosa en el futuro. En cuanto a Lucha Obrera y su eterna candidata, Arlette Laguiller, parece también que alcanzado su ocaso. Parece evidente que lo de 2002 fue su canto de cisne.

Comentario aparte merece la candidatura del altermundialista José Bové, que ha enterrado su prestigio en unos comicios a los que se ha presentado sin el colchón de alguna organización política de fuste. Su programa no era despreciable, pero tan sólo como candidato unitario de la izquierda consecuente podía haber tenido algún éxito, aunque en ningún caso pasar a la segunda vuelta. Todo parece indicar que los radicales antiglobalización tipo Attac se han decantado por la Royal. Al fin y al cabo la socialdemocracia les va como anillo al dedo.

Si algo positivo se puede sacar de lo ocurrido es que la izquierda del PS ha dejado de estar secuestrada por el PCF, que los trotskistas deben convertirse en el eje de futuro de un nuevo movimiento de izquierda, eso sí, superando los actuales sectarismos, aunque las próximas elecciones tampoco servirán de mucho en ese anhelo. Tendrán que trabajar con seriedad si quieren construir algo que despierte el interés de las clases trabajadoras y populares, más allá de sus incondicionales de siempre.

En cuanto a la parte de nuestro país que ha tenido elecciones, Ipar Euskal Herria, un par de apuntes. La consigna abstencionista no parece haber calado entre los abertzales, que han ido al voto útil a Royal o al cuasipaisano Bayrou. Bové logra mejorar su media estatal y la LCR obtiene un apoyo notable. La pequeñez de IEH frente al Hexágono no permite muchas aventuras en estos comicios, que no van a tener apenas reflejo en la vida política de nuestro país, al menos a priori.

2007/04/18

Escocia, ¿próximo estado europeo?

El prestigioso analista económico y profesor John Kay acaba de publicar un par de trabajos en el diario económico Financial Times de Londres, en el que defiende sin disimulo la viabilidad de la independencia de Escocia respecto del Reino Unido. Según el autor, esa posibilidad dejaría a un lado el tradicional victimismo escocés y la política de subsidios, para dar paso a largo plazo a una entidad económica similar a la que hoy disfrutan Suiza, Finlandia o Islandia.

Kay, autor de varios libros en torno a la economía y los mercados, estima que los primeros tiempos del nuevo estatus no serían fáciles, pero entiende que en la Europa actual hay sitio para los países pequeños que opten por la especialización, como también ha sido el caso de la vecina Irlanda. Además, John Kay añade que ya no son necesarias grandes fuerzas militares para defenderse de poderes hostiles.

El articulista, nacido en Edimburgo en 1948, pide finalmente el voto para el SNP (Partido Nacionalista Escocés), al que se le augura un brillante resultado en los próximos comicios a celebrar el 3 de mayo. Por otra parte, el actor Sean Connery, simpatizante y contribuyente financiero del partido, ha afirmado que si los nacionalistas ganan las elecciones y luchan por la autodeterminación, regresará a su país para vivir en una Escocia independiente.

Para leer los artículos completos de John Kay en inglés: Scotland y Victimhood

2007/04/16

¿Entrará CajaMurcia en la fusión de las cajas vascas?

El presidente de la Federación de Cajas de Ahorro Vasco-Navarras, Carlos Etxepare, que también lo es de la Gipuzkoa Donostia Kutxa, acaba de afirmar que la fusión de las cajas de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba sigue en pie y se puede retomar tras las elecciones de mayo, añadiendo que la misma podría incluir a entidades de otras comunidades autónomas.

Teniendo en cuenta el interés mostrado por Etxepare por "el desarrollo socio-económico de la región de Murcia", es posible que una de las cajas a tocar para la futura ampliación de la llamada "Gure Kutxa" sea precisamente CajaMurcia. Son conocidas las millonarias inversiones inmobiliarias realizadas por Kutxa en ese territorio, de la mano de conocidos expertos en la recalificación de terrenos con apellidos de rancio abolengo euskaldun: Maya, Aguirre, Soroeta... Los planes de urbanización de las parcelas de La Cerrichera y Lo Poyo están por el momento paralizados por iniciativa del gobierno regional, pero el señor Etxepare confía en que tras las elecciones los expedientes comiencen a moverse. Ni la polémica vivida en la última asamblea general, ni la necesidad de proveer con 152 millones de euros para cubrir su riesgo inmobiliario general y otros 85 para la gestión de su instrumental Inversur, la que opera en el Mediterráneo, parecen ser motivos suficientes para afectar al buen ánimo del presidente de Kutxa.

De todos modos, si la opción de CajaMurcia no prosperase, siempre les queda la posibilidad de Unicaja de Málaga, territorio en el que se asienta la ciudad de Marbella, bien conocida por sus pelotas urbanísticos, o CajaMadrid, la entidad bancaria con mayor número de sucursales en Ciempozuelos, municipio en el que Kutxa también ha probado suerte como promotor inmobiliario.

Al parecer, la posibilidad de llegar a acuerdos con CajaNavarra quedaría totalmente descartada por los enormes costes políticos que supondría para los inquilinos de Sabin Etxea, quienes, hoy por hoy, deciden los designios de la caja guipuzcoana.

2007/04/14

San Mamés Barria, un campo minado

He considerado conveniente esperar a que el equipo profesional de fútbol salga, aunque sea de forma momentánea, de los puestos de descenso, para opinar sobre el proyecto de campo de fútbol denominado "San Mamés Barria". Un proyecto que está generando diversas opiniones encontradas, tanto entre los socios y seguidores del Athletic Club, como entre los ciudadanos en general. Y los motivos para que genere discusiones son numerosos.

En primer lugar hay que decir que la tendencia actual en Europa tiende a la construcción de las grandes infraestructuras deportivas en las afueras de las ciudades, y no en el mismo centro, como es el caso que nos ocupa. A pesar de que en anteriores proyectos se barajó la posibilidad de sacarlo de ese lugar, lo cierto es que todos los planteamientos del club y del Ayuntamiento han girado en torno a la zona Basurtu-Olabeaga, descartando otras opciones. Aún estamos a tiempo para volver a estudiar el asunto y abrir la mirada hacia otras zonas de la ciudad, lo que evitaría el habitual colapso circulatorio que se produce en los días de partido.

En segundo lugar, tampoco parece que se haya barajado con intensidad la posibilidad de agrandar el actual estadio, cuyos meros arquitectónicos, en especial su arco, son unánimemente ponderados. Hay ocasiones en que destruir lo viejo y partir de cero está bien, pero en otras, tal vez en ésta, pudiera ampliarse el aforo sin necesidad de derruir completamente San Mamés Zaharra.

Una tercera cuestión aflora a la hora de atacar el proyecto. El Athletic Club de Bilbao, guste o no guste, es una entidad de derecho privada, por muchos simpatizantes que posea, incluso fuera de Bizkaia. Por lo tanto, corresponde a la entidad emprender el cambio de estadio. La escasez (teórica) de aforo que sufre el actual campo, no puede ser un problema que aparezca en la lista de prioridades de las instituciones públicas, léase Ayuntamiento, Diputación o Gobierno. Es más, me temo que existen decenas de asuntos mucho más importantes, que requieren la atención inmediata de esas entidades, como pueden ser la vivienda, la mejora de la atención sanitaria, la educación, la integración de los emigrantes, el mantenimiento de las vías de transporte, el medio ambiente y un muy largo etcétera.

Por el contrario, los propios responsables del club se han jactado de que el cambio de campo no supondrá ni un euro a los socios, al fin y al cabo, propietarios de la entidad, lo que resulta cuando menos chocante. ¿Se imaginan ustedes que el presidente de Iberdrola afirma que la torre que van a levantar en Abandoibarra no va a suponer ni un euro para los accionistas? ¿Que todo el dinero va a proceder de las arcas públicas? Probablemente se trataría de un escándalo político de primera magnitud, pero en el caso del club de fútbol, no sólo no es un escándalo, sino que se aplaude el hecho desde las instituciones que tienen la obligación de amparar los derechos de todos los ciudadanos, por encima de las preferencias deportivas de cada cual.

De todos es sabida la precaria situación económica del Athletic, asunto que debiera preocupar lo suficiente a sus directivos antes de dar pasos como San Mamés Barria. Un club que ha sido incapaz de ganar un sólo título en los últimos veinte años, que no puede intervenir con suficiencia en el mercado de fichajes, cuyos capitanes son cualquier cosa menos vizcainos y con una cantera tan paupérrima, que le ha llevado a estar dos años rozando el descenso de categoría, tiene bastantes más problemas a resolver de forma urgente que el nuevo estadio.

Aún y todo, aunque el club estuviera luchando por el título, es inconcebible que se atreva a abordar una operación económica de este calado en base a las ayudas de la Bilbao Bizkaia Kutxa (BBK), -entidad pública de ahorro, no lo olvidemos-, la Diputación Foral de Bizkaia y, casi con toda seguridad, el Ayuntamiento de Bilbao. El presupuesto inicial sale ya por 183 millones de euros (30.448,6 millones de las antiguas pesetas). Lo más probable es que en la fase de adjudicación del proyecto, ya que estamos con el proyecto base, se amplíe esa cifra, cosa que de seguro sucederá en la fase de ejecución, como en toda obra de estas características. En todo este tema, el único agente que ha actuado con prudencia ha sido el Gobierno Vasco. Justo es remarcarlo.

En séptimo lugar, hay que decir que el Diputado General, señor Bilbao, ha insistido en que en este proyecto no habrá pelotazo, que esas cosas sólo pasan fuera de su querida Euskadi. Habrá que señalar al dirigente foral que el Real Madrid, efectivamente, dio un pelotazo urbanístico en la capital española, sí. Y lo hizo vendiendo su patrimonio, la Ciudad Deportiva que poseía en el centro de la ciudad, para irse a las afueras. Y ese dinero no lo ha utilizado en construir un campo nuevo, sino en tapar agujeros de fichajes multimillonarios y en lavarle la cara al estadio de Chamartín. ¿Qué patrimonio podría vender el Athletic para afrontar una inversión de ese calibre?

En todo caso, ante una operación de tal envergadura, es obvio que las empresas constructoras se pelearán por participar en ella, para llevarse la mejor tajada posible. Que sean empresas de Bizkaia o de Laponia, es indiferente. Seguro, en todo caso, que serán conocidas por quienes dirigen el club, la BBK, la Diputación y el Ayuntamiento, curiosamente todos ellos tienen vínculos directos con el Partido Nacionalista Vasco.

Entrando ya en el proyecto en sí, sin ser arquitecto, pueden decirse un par de cosas. El mismo, realizado por una empresa vasca de alto nivel, es una copia más o menos acertada de otros estadios europeos, que no enlaza para nada con la señera presencia que el actual San Mamés marca en el panorama urbanístico de Bilbao. A ello se suma que, en tiempos de debate mundial sobre el cambio climático y el ahorro de energía, se plantea un estadio hiperiluminado, derrochador de energía y que dará un mal ejemplo a los ciudadanos sobre la manera de abordar toda esa problemática medioambiental. Despilfarrar recursos energéticos no está bien, ni siquiera en Bilbao.

Por último, y para no aburrir al lector, ya es hora de que la sociedad bilbaina y por extensión la vizcaina, aborde de forma civilizada y madura la desacralización de un club de fútbol como es el Athletic de Bilbao. Un club que a lo largo de su historia ha carecido de democracia interna -como tantos otros, claro-; que se sigue basando en un sistema orgánico como la asamblea de compromisarios; y que ha sido dirigido, salvo alguna excepción gloriosa, por las elites políticas, primero del franquismo y luego del nacionalismo más conservador. Tampoco es que sea como para sentirse muy orgulloso.

2007/04/12

Euskal Herria Bai, PNB ez

La confirmación de que en las próximas legislativas para la Asamblea Nacional francesa habrá una candidatura abertzale conformada por Abertzaleen Batasuna, Eusko Alkartasuna y Batasuna, debe ser recibida como una buena noticia, en medio de un panorama repleto de despropósitos, del que fueron buen reflejo las intervenciones de Imaz y Errazti en el pasado Aberri Eguna, centradas ambas en la crítica a la izquierda abertzale. Por cierto que lo realizado, de forma humilde, en Irun y Hendaia, gracias al colectivo Zazpiak Bat, es un paso en la dirección adecuada. Se ha logrado que al menos un día al año podamos sentirnos vascos junto al río que nos une, sin más condicionamientos estériles.

Pero a lo que ibamos. La candidatura Euskal Herria Bai, en cuyos trabajos preparatorios participó el PNB, es una esperanza para los territorios del norte, tan castigados por el desánimo, el olvido y la desidia durante demasiado tiempo. Es cierto que la ausencia de los jelkides de Imaz hace que la foto no sea redonda, pero al fin y al cabo, ellos se lo han buscado, poniendo como excusa el atentado de Barajas, haciendo de ETA y Batasuna un todo, y despreciando las ansias de unidad abertzale que se respiran en Lapurdi, Zuberoa y Behenafarroa.

Tras la negativa de EA para acudir en coalición con el PNV en la Navarra Occidental, lo acontecido ahora supone un segundo traspiés para los jelkides, que tan sólo parecen mantenerse en coalición en Nafarroa Garaia, territorio en el que su peso electoral es mínimo, pero al parecer el económico les da influencia.

Quienes tan pocos problemas tienen a la hora de apoyar los presupuestos del PSOE y quienes tan ardientemente apoyan su política en el llamado proceso de paz, deberían meditar un poco sobre su estrategia general, darse cuenta de que tal vez se están equivocando, y, por una vez siquiera, priorizar los intereses nacionales sobre los partidistas. Ya sé que todas las apelaciones de este tipo que se les hacen suelen caer en saco roto, pero al menos los seguidores de Joseba Egibar pueden llegar a sentir algo de vergüenza y tal vez puedan influir internamente para que las cosas cambien en el futuro.

El programa de mínimos que defenderá Euskal Herria Bai -marco institucional propio, apoyo al euskara e instrumentos para el desarrollo- puede ser asumido sin problemas por el PNB. Aún está a tiempo de hacerlo, pero mucho me temo que, como casi siempre, sea incapaz de dar ese paso valiente y en cambio se siga refugiando en fórmulas obsoletas e inmovilistas.

2007/04/10

No hay vuelta atrás para los mapuches

La paciencia mapuche es tan antigua que se pierde en las alas de los pájaros encinta. Pero, a veces, se viste de furia eterna, pues de ignotos lugares ha llegado desde siempre el fuego abrasador que incendia su tranquilidad. Así, alborotado el corazón y tensa la piel, se echa a los montes y a los bosques para gritar su palabra de dignidad. Y el winka se atemoriza y ataca con la arrogancia de siempre: indio, dice, salvaje repite; ignorante, enfatiza. Terrorista, al fin y al cabo, entonces allana comunidades, asalta, golpea y encarcela a todos aquellos que, de distintas maneras, luchan por los derechos del pueblo mapuche. José Huenchunao es uno de ellos. Werken de la Coordinadora Arauko-Malleko (CAM), fue recientemente detenido luego de permanecer cuatro años en la clandestinidad, suscitando reacciones orgásmicas por parte de las autoridades chilenas que se congratulaban de haber capturado - según su terminología - al principal dirigente político de la CAM. El responsable militar de la organización, según fuentes policiales, sería Héctor Lleitul quien fue detenido hace algunos meses. Esto implicaría la desarticulación de la Coordinadora la cual, por cierto, concentró la atención y focalizó los medios represivos del Estado en los últimos años, siendo una expresión más de la criminalización de la demanda mapuche por parte del Estado.

Dividir para triunfar

El resurgimiento del movimiento mapuche, a mediados de la década del noventa, confrontó directamente a las empresas forestales e hidroeléctricas que arrasaban con el territorio mapuche. Pero, por sobre todo, interpeló al Estado chileno y sus políticas asimilacionistas que destruían la cultura y la identidad mapuche, conculcando, además, sus derechos como pueblo. El Estado - agenciado por el gobierno de Eduardo Frei - respondió con la militarización del territorio mapuche, desplegando ingentes fuerzas y medios represivos en las comunidades en conflicto. No obstante, dicha estrategia fue un fracaso, pues el gobierno de la época realizó una lectura superficial de la situación que se había configurado, pensando que atacando los síntomas podría erradicar el problema. Además, la represión sistemática, la invasión violenta de las comunidades, la persecución y el encarcelamiento de dirigentes y comuneros, solo contribuyeron a fortalecer la unidad y la decisión de los mapuche que incrementaron las recuperaciones de tierras usurpadas y, al mismo tiempo, continuaron desarrollando un discurso autonómico que, en los hechos, superaba las demandas meramente culturalistas por otras de índole política.

En este contexto, el nuevo gobierno de Ricardo Lagos adoptó una estrategia biforme: la negociación con algunas expresiones del movimiento mapuche y la represión dirigida a otras. El objetivo central era dividir al movimiento mapuche y, de este modo, debilitarle para facilitar su control. Se trataba de diferenciar entre mapuche, entre organizaciones y entre estrategias. Y es en este marco que el gobierno resolvió focalizar la represión en la Coordinadora Arauko-Malleko, la cual se había transformado en una organización con una importante capacidad de convocatoria y movilización a nivel de comunidades, habiendo logrado, también, establecer grupos de apoyo en algunos de los principales centros urbanos. Con ellos no era posible negociar y, por lo demás, la misma CAM consideraba inaceptable dialogar con el gobierno, criticando a aquellos dirigentes que sí accedían a hacerlo

Criminalización y represión

La concentración del accionar represivo no fue casual, por cierto, se basaba en la convicción por parte de las autoridades chilenas que la CAM constituía un peligro debido a su política confrontacional y el desafío que dicha organización representaba por su estrategia. Es que la CAM consideraba que el territorio mapuche había sido ocupado militarmente por un poder extranjero a fines del siglo 19 y, por lo tanto, la lucha del pueblo mapuche tenía el carácter de una lucha de liberación nacional. Además, la CAM no solo era una organización que bregaba por los derechos del pueblo mapuche, sino que se autodefinía como revolucionaria y, como tal, era anti-capitalista, pues era este sistema el responsable de la situación actual de pobreza y marginalidad de mapuche y amplios sectores de la sociedad chilena. Por todo lo anterior, y por sus políticas de movilización, autodefensa y de recuperación de tierras, las cuales poseían carácter productivo, el gobierno optó por la represión selectiva, aunque jamás abandonó la persecución a otras organizaciones y comunidades mapuche. Se iniciaba y sistematizaba la criminalización de la demanda mapuche que transformaba la justa y legítima demanda social en un crimen terrorista. De ahí la utilización de la Ley de Seguridad Interior del Estado y de la Ley Anti-Terrorista y sus consecuencias: allanamientos, golpizas, detenciones y procesos con testigos secretos, pagados y protegidos por el Estado.

Numerosas instituciones nacionales e internacionales han criticado al Estado chileno por recurrir a legislación de la época de la dictadura militar para reprimir los derechos colectivos de un pueblo. De hecho, solo hace unos días, el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas otorgó un plazo de un año al Estado de Chile para realizar gestiones tendientes a modificar “la Ley 18.314, ley antiterrorista, por contener una definición demasiado amplia de tipos penales, lo que ha permitido la aplicación errónea de dicha ley a actos de protesta social mapuche”. Asimismo, plantea “tomar medidas inmediatas y eficaces para poner fin a abusos policiales contra los grupos vulnerables, y proceder a enjuiciar y sancionar a los funcionarios que comentan actos de malos tratos”. Y, también, el comité realiza un llamado a “asegurar que los niños y jóvenes indígenas no sean víctimas de brutalidad policial, y tomar medidas preventivas y correctivas cuando se sospeche de abusos policiales”.

Ya no hay vuelta atrás

Pero, a pesar de las buenas intenciones de los organismos internacionales, prosigue la represión en base a la Ley anti terrorista, y la detención de José Huenchunao es un claro ejemplo de ello. Por lo mismo, en declaración pública desde la cárcel de Angol, este señala que “el trasfondo de esto, es que yo soy un prisionero político perseguido por el Estado chileno y el sistema de dominación capitalista que arrebata los recursos naturales que pertenecen a nuestro pueblo mapuche”. Y son este Estado y este sistema los que continúan vulnerando los derechos de los niños indígenas al allanar violentamente sus comunidades, como lo es el caso de Temucuicui en la comuna de Ercilla. Sin embargo, ya no hay vuelta atrás, el movimiento mapuche ha tenido la capacidad de posicionar en el imaginario colectivo la idea del derecho a la autonomía y, por ello es que Huenchunao afirma que “más tarde que temprano, veremos como nuestro pueblo se despegará de esta opresión y transitará como pueblo digno por el camino de la libertad con autonomía y territorio. La demanda histórica de nuestro pueblo no podrá ser acallada, se levantara como emblema una y diez veces en el corazón y en el accionar político del mapuche”. Porque ya no hay vuelta atrás.

Texto: Mauricio Buendía [Giraluna, periódico latinoamericano];
Foto: qollasuyu.indymedia.org

2007/04/04

Las siglas durmientes de Iñigo Urkullu

El portavoz oficial del PNV, Iñigo Urkullu, ha asegurado esta semana que «al PNV, en estos momentos, le consta o no tiene duda de que la izquierda radical tiene las suficientes siglas, sean durmientes ya inscritas o registradas, como para poder presentarse a unas cuantas elecciones». El político encartado añadió que «si quiere» la izquierda abertzale estará presente en las elecciones. Esta es la postura oficial de una formación que dice estar en contra de la Ley de Partidos, que dice estar a favor de la unidad territorial de Euskal Herria, que dice estar a favor del euskara, que dice que tiene un programa progresista, que dice muchas otras cosas, pero que suele hacer justamente las contrarias.

Son tan listos sus máximos responsables, que aparte de conocer al dedillo las siglas durmientes de la izquierda abertzale, también saben de buena fuente, en este caso el radical Joseba Egibar, que ETA va a sacar un comunicado para Aberri Eguna, y además parece que su responsable máximo se sabe de memoria el número de teléfono del Palacio de la Moncloa. Lo que aparentan desconocer totalmente son los chanchullos en la Hacienda de Irun, los pisos y villas del candidato a Diputado General de Gipuzkoa o los continuos navajeos internos que se producen en el partido centenario.

Porque si nos ponemos a hablar de siglas durmientes se nos aparecen un montón en el entorno jelkide. Siglas como SP, de Scottish Power, empresa escocesa comprada por Iberdrola con la ayuda de Josu Jon Imaz. Euskaltel también es una sigla muy conocida en Sabin Etxea, gracias sobre todo a la labor de Ardanza, con chalet en Urdaibai y apartamento en la Costa del Sol, para que digan de Jauregi. ¿Les suena la sigla EiTB de un tal Ortuzar? Es una sigla muy apreciada en el partido, por su encomiable labor de apoyo al mismo. ¿Y la sigla BBVA? Ah, sí, un gran banco "vasco" donde tiene elevados intereses el partido, al igual que los tiene en otras siglas muy similares, BBK, dirigidas por Xabier de Irala, hombre muy ligado por tradición familiar a otras siglas, estas menos euskaldunes, CIA, ¿les suenan de algo? La lista sería interminable. Ahí está también la Kutxa del señor Etxepare, con patrióticos intereses inmobiliarios en Murcia, ¡qué cosas! La sigla OM, de Operación Malaya claro, también ronda por ahí, ¡y es que se elige cada socio!

Pero si miramos para atrás, a la historia jelkide, nos encontramos, en los años veinte del pasado siglo, por un lado con Comunión Nacionalista Vasca, CNV, de Ignacio Rotaeche, y por el otro con Aberri, de Luis Arana Goiri, el hermanísimo. Y también nos sale la SOV, la Solidaridad de Obreros Vascos de Policarpo de Larrañaga. Y el Jagi-Jagi de la República y la guerra, más independentista que nadie. EAB es otra sigla ¿durmiente? de EAJ-PNV, la de las mujeres abertzales, Emakume Abertzale Batza, sinónimo esta última de la maldita batasuna. Y para siglas gloriosas las EGI, Eusko Gaztedi del Interior o Indarra. También debería de recordar Imaz que existió un EGI-Batasuna, nombre maldito hoy en día, muchos de cuyos militantes entraron posteriormente en ETA.

Y no podemos pasar por alto que la misma JEL (Jaungoikoa eta Lege Zaharra) es una sigla durmiente, por si se tuercen las cosas, que nunca se sabe. Pero otra que me parece preciosa y digna de mejor uso es la que se empleó a la hora de recomponer el partido tras "la muerte del abuelo Pachi", que dicen algunos: BTI No es una marca de bicicletas, no, es el lema de la refundición. Batasuna Ta Indarra, muy acertado talismán. Lástima que con esa batasuna del principio del lema, ahora mismo no colaría en el registro del Ministerio español de la Gobernación que preside un tal Pérez Rubalcaba. Al fin y al cabo puede ser una señal del cielo que la palabra unidad sea ahora sinónimo de maldad en esta tierra vasca donde marcar la diferencia de pueblo, de barrio e incluso de portal, es costumbre tan arraigada.

2007/04/03

Los cuatro pilares de Cándido

Se trata (habrá que decir se trataba) de que la izquierda abertzale diese el paso de legalizarse bajo la antidemocrática Ley de Partidos. Se le instó a ello desde diversos ámbitos, incluido el Gobierno del Reino de España. Pues bien, la izquierda abertzale da el solicitado paso y se encuentra de nuevo en manos de la Injusticia. Fiscalía y Abogacía del Estado presentan sendas demandas de ilegalización contra "Abertzale Sozialisten Batasuna", la nueva formación abertzale.

Sin esperar ningún dictamen, Cándido Conde-Pumpido sentencia "ASB es una continuación de Batasuna". Y para ello se basa en "cuatro pilares" indestructibles, a saber: 1/ "Continuidad en la denominación", ya que ambas formaciones incluyen la palabra batasuna (unidad). 2/ "Vicio relativo a los promotores", al encontrarse entre ellos dos personas que pertenecen a la dirección de un partido ilegal, disuelto e inexistente. 3/ "Identidad en la organización y estructura", ya que los órganos son similares, incluida la M/esa Nacional de 35 miembros. 4/ "Proximidad a la violencia o lucha armada", ya que una de las promotoras está imputada (que no condenada) por el juez Garzón por supuesta integración en banda armada.

Hasta aquí los cuatro pilares, traídos por los pelos y fácilmente desmontables. Para salvar el primero basta con denominar a la nueva formación como "Abertzale Sozialisten Elkartea (o Alderdia... Ekintza... Alkartasuna...). Para salvar la segunda, basta con cambiar los dos promotores demonizados por un vecino de Karrantza amigo mío y una señora de Tafalla simpatiquísima. Asunto resuelto. Respecto al tercer pilar de Pumpido, se cambia lo de Mesa Nacional por Euskalherriko Buru Batzar, Comité Nacional o Junta Directiva Nacional, y en cuanto al número de miembros se deja en 27 o se aumenta a 43, que no pasa nada por eso. Por último, el cuarto pilar queda invalidado con la solución del segundo, ya que el karrantzarra y la tafallesa tienen el expediente tan limpio como el propio Cándido.

El Gobierno, mejor dicho el Estado español, sabe perfectamente lo que tiene que hacer para desatascar la situación y avanzar hacia un nuevo escenario en el que sobren todas las expresiones de violencia, incluidas las redadas policiales de los últimos días. Que dé ya el paso y se deje de chapuzas seudojurídicas que pueden ser desmontadas en diez minutos por un lego en leyes como el firmante.

Mejor haría el PSOE en sustentar su política en otros cuatro pilares: El reconocimiento de la nación vasca; la aprobación de su derecho a decidir; dejar vía libre a su reagrupamiento territorial partiendo de lo que hay y solucionar las consecuencias del conflicto armado, por todas las partes y sin discriminaciones. Esos sí que serían pilares indestructibles para construir la casa de la paz.